Tras más de cuarenta días de búsqueda, ha llegado la primera y triste noticia sobre la niñas de Tenerife desaparecidas. La Guardia Civil ha hallado en el mar el cuerpo sin vida de Olivia, de 6 años, la menor desparecida junto a su hermana Anna, de tan solo un año. A la menor de las hermanas y al padre se le sigue buscando en estos momentos.
Por tanto, la búsqueda sigue en estos momentos en Tenerife. La benemérita se está ayudando del buque oceanográfico Ángeles Alvariño, el barco que dispone un sonar de barrido lateral y un robot submarino.
Claves de la búsqueda
Las labores de búsqueda no están siendo fáciles. La Guardia Civil viene destacando las dificultades del trabajo que realiza el buque por la compleja orografía de los fondos marinos canarios. Los rastreos se están produciendo en zonas con profundidades de hasta 2.000 metros con muchos desniveles debido a su origen volcánico.
Según informa Efe, la benemérita explica que no se trata de una llanura oceánica sino de una superficie con diferentes accidentes geográficos que añaden complejidad al trabajo del Ángeles Alvariño.
La incorporación de este buque al dispositivo de búsqueda ha permitido avanzar en la investigación. Trabaja ininterrumpidamente durante todo el día y la noche y la búsqueda continúa en la zona acordada, a partir del geoposicionamiento del móvil de Tomás Antonio G.C. la noche del 27 de abril, cuando se hizo a la mar en dos ocasiones sin las niñas
Hace unos días encontró una botella de buceo y una funda nórdica, propiedad del padre de las niñas. Y este jueves se conoció la noticia de que había hallado el cuerpo de una menor, la mayor de las niñas de Tenerife.
Cronología de su desaparición
El pasado 27 de abril, Tomás Antonio G.C. no devolvió a sus hijas a la hora acordada con su expareja y le avisó por teléfono de que no las volvería a ver ni a él tampoco. Algo que se conoce como violencia vicaria, una agresión a los hijos para hacer daño a las mujeres a través de los menores. Desde el minuto uno, la Guardia Civil calificó de alto riesgo esta desaparición.
Estos son los principales acontecimientos en torno al caso:
27 abril: Tomás G.C., padre de Anna y Olivia, de 1 y 6 años, respectivamente, no devuelve a sus hijas a su madre y expareja, Beatriz.
28 abril: Conforme a la reconstrucción policial, Tomás zarpó del puerto de la Marina de Tenerife, donde tiene atracado un barco. Horas después, el barco es hallado a la deriva, sin ocupantes.
29 abril: En el mar aparece flotando una silla infantil de retención en vehículos perteneciente a una de las niñas. Un día después, la Guardia Civil comunica el hallazgo de restos de sangre en la embarcación.
30 abril: Se practican registros en la casa y una finca del padre de las menores en el municipio de Candelaria.
4 mayo: Divulgan el primer vídeo de las niñas.
14 mayo: La madre difunde una carta en la que asegura que no parará hasta encontrarlas.
17 mayo: La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, anuncia que se incorporará un sonar y un robot submarino a la búsqueda.
23 mayo: Parte hacia Tenerife el buque oceanográfico Ángeles Alvariño, dotado con sonar y robot submarino, capaz de maniobrar hasta 2.000 metros de profundidad.
30 mayo: El buque oceanográfico Ángeles Alvariño comienza las labores de búsqueda en el fondo marino.
7 junio: Hallan una botella de oxígeno y una funda nórdica en la zona donde fue hallada la lancha. Los objetos pertenecían al padre.
10 junio: La Delegación del Gobierno en Canarias informa de que ha aparecido en el mar un cuerpo sin vida aparentemente de una menor en la zona de búsqueda de las niñas desaparecidas en Tenerife. Horas después, se confirma que se trata de la mayor de las hermanas.